Retiran estatuas de Fidel Castro y Che Guevara en la Tabacalera por orden de la alcaldesa Alessandra Rojo de la Vega
La alcaldesa de Cuauhtémoc, Alessandra Rojo de la Vega, ordenó el retiro de las estatuas de Fidel Castro y Ernesto Che Guevara en la Tabacalera. La decisión generó controversia entre vecinos, autoridades y activistas.

Por Mario Victorino
El 16 de julio de 2025, la alcaldía Cuauhtémoc ejecutó el retiro de las estatuas de Fidel Castro y Ernesto Che Guevara del Jardín Tabacalera, en el corazón de la Ciudad de México. La acción, encabezada por la alcaldesa Alessandra Rojo de la Vega, ha desatado un intenso debate sobre la legalidad, el simbolismo y el uso del espacio público.
Las esculturas formaban parte del Monumento Encuentro, obra del artista Óscar Ponzanelli, que conmemoraba el momento histórico en que ambos revolucionarios se conocieron en México en 1955. Desde su instalación, el conjunto escultórico había sido objeto de controversia por su carga ideológica y por presuntas irregularidades administrativas.
⚖️ Motivos detrás del retiro
La alcaldía argumentó que la decisión respondió a tres factores principales:
Falta de autorización oficial: Las estatuas no contaban con registro ante el Comité de Monumentos y Obras Artísticas en Espacios Públicos (COMAEP), ni con permisos formales para su colocación.
Petición vecinal: Habitantes de la colonia Tabacalera exigían recuperar el espacio público, señalando que las esculturas obstruían el parque y no representaban los valores de la comunidad.
Custodia irregular: Las figuras estaban bajo resguardo de un trabajador de la alcaldía, sin documentación que acreditara su propiedad o destino.
La alcaldía anunció que las esculturas serán resguardadas y que se evalúa su posible subasta, con el objetivo de recuperar recursos públicos y reinvertirlos en mejoras urbanas.
🏛️ Reacciones institucionales y sociales
El Gobierno de la Ciudad de México expresó su desacuerdo con el retiro, señalando que se realizó sin autorización y que las esculturas tienen valor histórico. La presidenta Claudia Sheinbaum propuso reubicarlas en otro espacio público, si la alcaldía Cuauhtémoc no desea conservarlas.
Por otro lado, activistas, artistas y simpatizantes de la izquierda calificaron la acción como una medida ideológica que atenta contra la memoria histórica. Algunos convocaron a llenar plazas públicas con figuras de revolucionarios como forma de protesta simbólica.
🌐 ¿Qué representa este retiro?
Más allá del debate político, el retiro de las estatuas plantea preguntas sobre el papel del arte en el espacio público, la memoria histórica y la relación entre ciudadanía y gobierno local. ¿Debe el arte conmemorativo responder a consensos comunitarios? ¿Qué límites existen entre ideología y patrimonio?
La decisión de Rojo de la Vega marca un precedente en la gestión cultural de la capital, y podría abrir la puerta a nuevas discusiones sobre qué figuras merecen ser homenajeadas en los parques y plazas de la ciudad.