Adiós a la reina de las rumberas: el legado inmortal de "Tongolele"
Fallece Yolanda Montes Farrington, "Tongolele", ícono del cine de rumberas y la época de oro del cine mexicano. Su legado perdura a través de sus películas, presentaciones y entrevistas.
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Por Mario Victorino
Nacida en Nueva York el 29 de septiembre de 1932, de ascendencia puertorriqueña y africana, pero nacionalizada mexicana, Tongolele fue una figura multifacética que conquistó los escenarios y la pantalla grande con su talento, belleza y sensualidad. Desde muy joven mostró su pasión por el baile y la actuación, debutando en el Teatro Nacional de Nueva York a los 14 años como bailarina de danza tahitiana.
Su llegada a México en 1952 marcó un hito en su carrera. Se convirtió en una de las principales figuras del cine de rumberas, un género que agregaba elementos de la comedia, el drama y la música afrocubana. Películas como "La negra Tomasa" (1953), "Acapulco" (1953), "La mujer de enfrente" (1957) y "Mambo en México" (1959) la catapultaron a la fama, convirtiéndola en un símbolo de la cultura popular mexicana.
En la década de 1960, Tongolele se consolidó como una de las vedettes más destacadas de México, deslumbrando al público en los centros nocturnos más importantes del país. Su presencia en el escenario era magnética, su baile sensual y enérgico, y su carisma la hizo merecedora del título de "La Reina de las Rumberas".
A pesar de su éxito en el cine y el teatro, Tongolele también incursionó en la televisión, participando en programas y telenovelas que le permitieron llegar a un público aún más amplio. Su versatilidad como artista la llevó a explorar otros géneros y formatos, demostrando su capacidad para adaptarse a los cambios en la industria del entretenimiento.
En la década de 1990, Tongolele regresó al cine con papeles importantes en películas como "Danzón" (1991) y "Perfume de gardenia" (1998), demostrando que su talento seguía intacto a pesar del paso del tiempo. Su participación en estas producciones fue un reconocimiento a su trayectoria y a su legado en el cine mexicano.
El fallecimiento de Tongolele deja un vacío irremplazable en el mundo del espectáculo y la cultura popular mexicana. Su legado, sin embargo, perdurará a través de sus películas, presentaciones y entrevistas, que seguirán inspirando a nuevas generaciones de artistas. Su nombre quedará grabado con letras de oro en la historia del cine mexicano y en la memoria de quienes la admiraron y disfrutaron de su talento.