Rosario Piedra y la CNDH: Entre Controversias y Señalamientos por Omisiones en Derechos Humanos
Desde que Rosario Piedra Ibarra asumió la presidencia de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en México, su gestión ha sido objeto de constante escrutinio.
Por Mario Victorino
Desde que Rosario Piedra Ibarra asumió la presidencia de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) en México, su gestión ha sido objeto de constante escrutinio. En un periodo de casi cinco años, Piedra ha enfrentado críticas por lo que se percibe como omisiones y posturas polémicas, especialmente en temas de abuso de autoridad, violencia de género, y violaciones a derechos humanos. Estos señalamientos han suscitado debates sobre la independencia y la efectividad de la CNDH bajo su liderazgo.
Uno de los puntos más controversiales ha sido la supuesta falta de respuesta efectiva de la CNDH ante incidentes de violencia durante protestas y casos de abuso policial. En eventos de represión y uso excesivo de la fuerza por parte de cuerpos de seguridad, la institución ha sido criticada por no tomar una postura más enérgica y por emitir declaraciones que, para muchos, no reflejan el espíritu de defensa de derechos humanos que caracteriza a la comisión.
La cercanía de Piedra Ibarra con el gobierno federal también ha generado cuestionamientos sobre la autonomía de la CNDH. Al inicio de su gestión, diversos sectores expresaron su preocupación por la posible influencia del gobierno sobre las decisiones de la comisión. Desde entonces, algunos analistas han señalado que su enfoque parece alinearse frecuentemente con el discurso oficial, generando dudas sobre la imparcialidad en casos de violaciones a derechos humanos cometidas por agentes estatales.
Otro aspecto que ha causado críticas es su respuesta a la crisis de violencia de género en el país. En medio de un preocupante aumento de feminicidios y violencia hacia mujeres, la CNDH ha sido señalada por colectivos feministas y activistas por su supuesta falta de acción concreta y efectiva. La comisión ha sido acusada de emitir declaraciones sin propuestas contundentes para enfrentar la problemática, lo cual ha decepcionado a quienes esperan una defensa proactiva de los derechos de las mujeres.
La gestión de Rosario Piedra también ha estado marcada por pronunciamientos polémicos. Uno de los más debatidos fue su comentario sobre los derechos humanos, afirmando que estos han sido una "concesión" del Estado, lo cual causó gran malestar entre defensores de derechos humanos y activistas, quienes consideran que esta visión minimiza el papel esencial de los derechos humanos como un deber del Estado hacia sus ciudadanos.
Ante estos señalamientos, diferentes grupos de la sociedad civil y actores políticos han sugerido la posibilidad de una revisión exhaustiva del desempeño de la CNDH y han pedido un análisis sobre la independencia y la efectividad de su liderazgo. La discusión sobre el papel de Rosario Piedra y su gestión en la CNDH plantea un escenario complejo para la institución en términos de confianza pública y cumplimiento de su misión fundamental de proteger los derechos humanos de todos los ciudadanos.