Tras nuevas medidas migración irregular cae un 76% en la frontera entre México y EE. UU.
En México, el uso de visas humanitarias y programas de apoyo fueron modificados, limitando el tránsito de migrantes hacia la frontera norte.
REDACCIÓN
La migración irregular en la frontera entre México y Estados Unidos ha caído drásticamente, alcanzando una disminución del 76% en los últimos meses. Este descenso es el resultado de una serie de nuevas medidas impulsadas por ambos gobiernos para frenar los flujos migratorios y mejorar la seguridad en la región. La administración de Joe Biden implementó restricciones al asilo y un refuerzo de la vigilancia en la frontera, mientras que el gobierno mexicano incrementó el control en rutas migratorias clave y amplió los traslados de migrantes hacia zonas alejadas de la frontera norte.
La política estadounidense de limitar el asilo para migrantes que cruzan sin autorización y exigir que soliciten protección en terceros países ha sido uno de los factores más decisivos en esta reducción. Las deportaciones aumentaron y las autoridades establecieron un umbral de 1,500 detenciones diarias como indicador para mantener el sistema de asilo en funcionamiento, endureciendo así las condiciones de entrada para quienes buscan refugio en Estados Unidos.
En México, el uso de visas humanitarias y programas de apoyo fueron modificados, limitando el tránsito de migrantes hacia la frontera norte. Las autoridades mexicanas reubicaron a miles de personas hacia zonas como Tabasco, en el sur del país, como una estrategia para descongestionar la frontera y reducir los intentos de cruce. Sin embargo, se teme un nuevo aumento en la migración debido a crisis políticas y económicas en países de América Latina, especialmente Venezuela, que continúa siendo uno de los principales países de origen para quienes buscan ingresar a Estados Unidos