El oscuro centro de operaciones del crimen organizado en Jalisco
Conoce los oscuros secretos del Rancho Izaguirre, un centro de operaciones del CJNG en Jalisco. Hallazgos recientes revelan crematorios clandestinos y restos humanos.
Por Mario Victorino
Ubicado en la comunidad de La Estanzuela, en el municipio de Teuchitlán, Jalisco, el Rancho Izaguirre ha sido identificado como un epicentro de actividades ilícitas vinculadas al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Este predio, que ya había sido intervenido por las autoridades en septiembre de 2024, volvió a ser noticia tras el hallazgo de crematorios clandestinos, restos humanos y otros indicios alarmantes.
El pasado 5 de marzo, el colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, en colaboración con la Guardia Nacional, ingresó al rancho tras recibir una llamada anónima que alertaba sobre la presencia de restos humanos. En el lugar se encontraron cinco lotes de restos óseos calcinados, más de 400 prendas de vestir, casquillos de diversos calibres y otros objetos personales. Estos hallazgos confirman que el sitio era utilizado como un campo de entrenamiento y exterminio por el CJNG.
A pesar de que el rancho había sido asegurado por la Fiscalía Estatal en 2024, los sellos de resguardo estaban rotos, lo que permitió que las actividades ilícitas continuaran. Este hecho ha generado cuestionamientos sobre la eficacia de las intervenciones previas y la supervisión de las autoridades.
El Rancho Izaguirre no solo representa un lugar de horror para las víctimas, sino también un símbolo de los desafíos que enfrenta México en la lucha contra el crimen organizado. La magnitud de los hallazgos subraya la necesidad de estrategias más efectivas y una mayor colaboración entre los niveles estatal y federal para combatir estas actividades.