Peso mexicano avanza pese al desplome del petróleo y la cautela en Wall Street
El peso mexicano logra avances frente al dólar pese al desplome de los precios del petróleo y la cautela en Wall Street. Conoce las razones detrás de su fortaleza y el impacto en la economía nacional.
Por Mario Victorino
El peso mexicano mostró fortaleza en los mercados internacionales al registrar ganancias frente al dólar, incluso en un contexto marcado por la caída de los precios del petróleo y la incertidumbre en Wall Street. La moneda nacional se consolidó como una de las divisas emergentes más resistentes, respaldada por factores internos y externos que han favorecido su desempeño.
Contexto global
Los precios del petróleo sufrieron un desplome debido a la sobreoferta y a la menor demanda proyectada en los principales mercados energéticos. Este escenario suele impactar negativamente a economías vinculadas al crudo, pero en el caso de México, el peso logró mantenerse firme gracias a:
- Flujos de inversión extranjera directa y de cartera que continúan entrando al país.
- Política monetaria restrictiva del Banco de México, que mantiene atractivos los rendimientos en pesos.
- Estabilidad macroeconómica relativa, con disciplina fiscal y control de deuda pública.
- Remesas históricas, que sostienen el consumo interno y fortalecen la balanza de pagos.
Wall Street en cautela
La bolsa estadounidense mostró movimientos limitados ante la expectativa de nuevas decisiones de la Reserva Federal y la volatilidad en los mercados energéticos. La cautela de los inversionistas se reflejó en operaciones moderadas, pero el peso mexicano logró aprovechar el diferencial de tasas y la confianza en la economía nacional para avanzar frente al dólar.
Impacto en México
El avance del peso mexicano en este contexto tiene varias implicaciones:
- Importaciones más baratas, lo que ayuda a contener presiones inflacionarias.
- Mayor confianza en los mercados financieros, que refuerza la estabilidad de bonos y activos mexicanos.
- Competitividad exportadora moderada, ya que un peso fuerte puede encarecer productos nacionales en el exterior.
- Señal positiva para inversionistas, que ven en México un refugio atractivo dentro de las economías emergentes.
Perspectivas
Analistas coinciden en que el desempeño del peso dependerá de la evolución de los precios del petróleo, las decisiones de política monetaria en Estados Unidos y la capacidad de México para mantener estabilidad fiscal. Aunque el entorno global es incierto, la moneda mexicana ha demostrado resiliencia y podría seguir destacando entre las divisas emergentes.