Uruapan se moviliza: marcha multitudinaria exige justicia por Carlos Manzo
Miles marchan en Uruapan para exigir justicia por el asesinato de Carlos Manzo. Comercios, escuelas y empresas se suman al paro ciudadano contra la violencia.
Por Mario Victorino
Este viernes 7 de noviembre, Uruapan vivió una de las movilizaciones más grandes de su historia reciente. Miles de ciudadanos vestidos de blanco tomaron las calles para exigir justicia por el asesinato del alcalde Carlos Manzo Rodríguez, ocurrido el 1 de noviembre durante el Festival de las Velas. La marcha, convocada por el movimiento “Uruapan por la Paz”, reunió a comerciantes, estudiantes, trabajadores, empresarios y familias completas en un grito colectivo contra la violencia que azota la región.
Desde temprana hora, negocios, escuelas, gasolineras y oficinas públicas suspendieron actividades como parte de un paro ciudadano que acompañó la manifestación. La marcha partió desde la Glorieta de McDonald’s y recorrió las principales avenidas de la ciudad, incluyendo Paseo Lázaro Cárdenas, Morelos y 5 de Febrero, hasta culminar en la Pérgola Municipal.
📣 Sectores unidos contra la violencia
La protesta no solo fue ciudadana: también se sumaron sectores productivos clave como la Asociación de Productores y Empacadores Exportadores de Aguacate de México (APEAM), uno de los más afectados por extorsiones y cobros de piso. Empresas como Café La Lucha y agencias de viajes locales también participaron, cerrando sus puertas en señal de duelo y exigencia de justicia.
Durante el recorrido, los asistentes portaron pancartas, flores, moños negros y mensajes dirigidos al gobierno estatal y federal. La abuela de Carlos Manzo encabezó la marcha, acompañada por líderes comunitarios y representantes del sector salud y educativo.
⚠️ Un crimen que sacudió a Michoacán
El asesinato de Carlos Manzo, quien había denunciado públicamente la presencia del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en Uruapan, desató una ola de indignación en todo Michoacán. La ejecución en plena vía pública, frente a ciudadanos y medios, fue interpretada como una represalia directa del crimen organizado.
La marcha de este viernes representa un punto de quiebre: la ciudadanía exige que el caso no quede impune y que se garantice seguridad para quienes ejercen cargos públicos. La movilización también busca visibilizar el impacto de la violencia en la vida cotidiana de Uruapan, donde el miedo y la extorsión se han vuelto parte del paisaje.
🧩 Justicia, no simulación
La exigencia es clara: justicia real, no simulada. Los ciudadanos de Uruapan han demostrado que el hartazgo puede convertirse en acción colectiva. La marcha por la paz no solo honra la memoria de Carlos Manzo, sino que exige un alto a la impunidad y una respuesta firme del Estado.
La Fiscalía estatal continúa con las investigaciones, mientras la sociedad civil mantiene la presión para que el crimen no se diluya entre cifras y discursos.